martes, 17 de abril de 2012

MINI-HISTORIAS (parte 1)


POESÍA.
“¿Qué es un logaritmo neperiano? Dices mientras clavas en mi pupila tu pupila azul. ¿Qué es un logaritmo neperiano? ¿Y tú me lo preguntas? Un logaritmo neperiano … eres tú. “ Gustavo Adolfo Bécquer (primera versión).

LECCIÓN DE HISTORIA.
Los niños que cursaban sus estudios en la Grecia presocrática eran muy afortunados, pues la tabla periódica solo constaba entonces de cuatro elementos: aire, agua, fuego y tierra.

SOLO EN LA CUMBRE.
Aclamado por las masas el campeón del mundo de máquinas recreativas. El joven AAA, que ha estampado su firma en las máquinas de casi todo el globo, celebra su victoria con desgana. Cambiaría el prestigioso título por un segundo con Erika Eleniak, la vigilante de la playa.

BUSINESS MAN.
Siempre tuve mala suerte en los negocios. Aquel cibercafé en un pueblo sin luz eléctrica ni teléfono fue mi mejor inversión.

PENSAMIENTO ENCADENADO.
Kant afirmó en su “Crítica de la razón pura” lo siguiente: “No puedo conocer la libertad como propiedad de un ser al que atribuyo efectos en el mundo sensible.” Inspirado por esta profunda reflexión, Suetonio Gijonenca desarrolló los alfajores sin azúcar para diabéticos.

BRASIL.
Cuando encontraron a Sir Arthur Scotch bailando desnudo por las calles a ritmo de samba y tirando serpentinas a diestro y siniestro, atribuyó su comportamiento a un tic nervioso, que le empujaba irresistiblemente a obrar de ese modo.

ÚLTIMAS NOTICIAS.
Detenido en su domicilio R.G.F, que pretendía distribuir el último single de la tuna compostelana. Se le acusa de crímenes contra la humanidad.

CURIOSIDAD.
En Gante (Bélgica) existe una calle cuyo nombre no puede ser pronunciado sin perder medio litro de saliva. Además te encierran en un lúgubre calabozo si desafías la ley de la gravedad a partir de las 4 de la tarde. Resulta conmovedor ver a la gente pegada al suelo, cubiertos de nieve, esperando que pasen las horas.
Al parecer los belgas son buena gente, pero no permiten que nadie pronuncie la letra erre en cafeterías pintadas de rojo. Debe ser por la vieja costumbre del rey Alfred, que tenía frenillo y muy mala leche cuando alguien se reía de su defecto en el paladar.

MIS PREFERENCIAS.
Siempre me he sentido irremisiblemente atraído por mujeres de ojos penetrantes y que conserven casi todos los dientes.

ESPÍRITU OLÍMPICO Y GUERRERO.
Cuando el atleta Filípedes corría por los polvorientos caminos, tan rápido como sus piernas le permitían, para informar a los suyos acerca del desembarco persa, pensaba, al borde del agotamiento, que hubiera preferido que aquella batalla se llamara “la de los 100 metros lisos” en lugar de Marathon.

MENSAJE PÓSTUMO.
Las últimas palabras de Lord Flannigan fueron: “Que caiga en este instante fulminado si miento”.

TODO UN TRIUNFADOR.
“Oda a una barra de pan” fue su primer éxito y su único libro de poesía. Para sanear su maltrecha economía escribió una novela costumbrista: “Mandando a la abuela por droga”, que le reportó pingües beneficios. Sin embargo, su mayor logro tuvo lugar en el Campeonato Mundial de Aguante de Respiración, en el que logró el puesto decimosexto. 

HASTA EL GORRO.
Empiezo realmente a hartarme de las técnicas agresivas de marketing. Ayer irrumpieron en mi casa cuatro tipos encapuchados que ataron a la pata de la mesa, con unas esposas, a un vendedor de enciclopedias. Éste me aseguró que si no vendía algo hoy, arponearían a su familia. No le compré nada. En otra ocasión hablaré de la máquina que provoca sueños con publicidad subliminal.

LA VERDAD SOBRE HUDINI.
Hay a quien no le gustan las sorpresas, como al gran mago Hudini, que descubrió, sumergido en la piscina en la que se ahogó atado con cadenas, que se había equivocado de chaqueta y que la llave que abría el candado la tenía el hombre elefante en un doble fondo de su americana. Infructuosamente intentó abrir el cerrojo con un sandwich de queso, que era lo único que tenía a mano y así le fue. Murió ahogado en un ataque de risa, cuando se dio cuenta de lo ridículo de la situación.

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